El crecimiento de una nueva narrativa inspirada en cuatro escritores latinoamericanos fundamentales de los años 60, causó una nueva perspectiva de la literatura hispanoamericana que hasta hoy es criticada, ¨si la novela hispanoamericana de la década del sesenta ha llegado a tener esa debatible existencia unitaria conocida como el boom, se debe más que nada a aquellos que se han dedicado a negarlo¨ (Donoso, 1); Autores como García Márquez, Cortázar, Fuentes y Vargas Llosa, fueron quienes marcan el punto de partida hacia un nuevo mundo literario, que no solo trae nuevos temas, personajes y mundos, sino también nuevos lectores que antes no se habían involucrado en la literatura. Para comenzar, considero pertinente establecer que una de las condiciones históricas de este llamado boom de la literatura es sin duda la Revolución Cubana en 1959 y que justamente este hecho marca la unión y convicción de escritores bajo un mismo pensamiento político que se dedican a narrar un nuevo tipo de novelas inspiradas ya no en los clásicos estadounidenses como Hemingway, sino en su propia realidad, como un reflejo de su identidad pero dentro de un nuevo contexto. Así, cambia la perspectiva de la novela en América Latina y ya no se encuentra con un Huasipungo de Jorge Icaza denunciando a través de las letras la injusticia social ¨El novelista de los países de Hispanoamérica escribía para su parroquia, sobre los problemas de su parroquia y con el idioma de su parroquia¨ (Donoso, 20), sino a un Vargas Llosa con una Ciudad y los Perros que si bien bajo un criterio regional, no retrata a la vida del Barrio de Miraflores en Lima.
Por un lado, existen autores como Fuentes que identifican al boom como una nueva historia dentro de la literatura de Hispanoamérica que rechaza la antigua ¨tendencia documental y naturalista de la novela hispanoamericana¨ (Fuentes, 11) y se da cuenta que se está frente a una revolución intelectual que radicaliza su obra en el pasado, presente y futuro. Sin embargo, asimismo existen autores quienes consideran que dicho fenómeno no es más que una nueva tendencia de ¨marketing¨, creada por los editores, tomando como elemento de poder de mercado a las obras; en efecto, Rama establece que lo orígenes del boom están ¨ en la terminología del marketing moderno norteamericano para designar un alza brusca de las ventas de un determinado producto en las sociedades de consumo¨ (Rama, 165). De manera que sin existir un concepto general o mejor dicho concordante entre los críticos de la literatura sobre los orígenes y esencia del boom latinoamericano, considero que está en cada una de las personas que han sido parte de este cambio, caracterizarlo ya sea como fenómeno literario o como fenómeno del mercado. Personalmente, una vez analizadas las distintas perspectivas del boom, y de haber leído tanto novelas hispanoamericanas anteriores a la época de los 60 y aquellas que corresponden a la ¨nueva novela¨, considero que el boom latinoamericano es indudablemente uno de los movimientos literarios más importantes que ha tenido la literatura hispanoamericana porque deja de lado a la literatura del realismo social y migra a una autonomía literaria creadora de nuevos mundos; termino citando en este aspecto a Donoso que dice ¨el boom de ventas no ha sido producido por los escritores sino por innominados enemigos, en boca de quienes pone críticas suficientemente primarias como para que cómodamente puedan contestarlas¨. (Rama, 172).
(Número de palabras: 575)
Textos Consultados:
· Donoso, José. Historia Personal del Boom. Alfaguara, Chile, 1998
· Fuentes, Carlos. La nueva novela hispanoamericana. México, 1980
· Rama, Ángel. El Boom en perspectiva. Signos Literarios. 2005